Buenas tardes.
Como podréis comprobar soy fan de las historias de King, pero también tengo un hueco en mi corazón para este juego. Debo decir que fue el mejor regalo en Navidades que el Olentzero me haya traído. ¿Por qué? Muy fácil, es el único juego de mesa con el que he podido jugar solo: haciendo de Morcar y sus huestes e intentando salvar el nombre del Imperio. Una locura, pero me pasaba horas y horas delante de esas miniaturas (a las que después se les unieron chapas de botellas con dibujos para crear nuevos monstruos). Además, un amigo me dio su "Herocults" (¿puede ser?), que era más tipo rol que Heroquest. Una manera de tener un tablero más pequeño.
Recuerdo que llegué a casa un sábado por la mañana a la hora de comer y conociendo ya el gran secreto que nos rompe la infancia y nos demuestra como es la vida de dura, le pedí a mi padre la friolera cantidad de 3000 pesetas. Y ni corto ni perezoso, me fui a Simago (dónde estarán esos almacenes) y me lo compré. Si no recuerdo mal, el que yo tengo fue del primer año que se vendió en España.
Ahora, con treinta años que tengo, he vuelto a sacarlo del armario, donde se hallaba con "La isla de fuego" de MB (otro título que me gustaba). Gracias a mi sobrino, ahora tengo un compañero con el que jugar, aunque él quiere ser siempre Morcar (nos viene de familia).
Tendré que buscar algunos retos sueltos que hice en los cuadernos cuadriculados que llevábamos al colegio, y si tengo tiempo, os los iré subiendo para que tengáis alguno más en vuestra colección.
Sin mas, y esperando no haber sido demasiado pesado en esta introducción, os saludo y da las gracias por esta comunidad:
Roland de Gilead - José Luis
