Yo personalmente intuyo que la mejor opción sería que las cartas usadas por el Malvado Brujo se devuelvan al mazo, porque así de daría más juego a la estrategia y por no privar a los héroes de ciertas pócimas durante toda la partida sí o sí por pura mala suerte.
Al final, lo mejor del HQ era que podías hacer lo que quisieras con las reglas jeje!
Es cierto que, dada la variedad de cartas que pueden crearse, no todas podrán categorizarse como “oro” y “pócimas”, y que si se empiezan a meter más reglas, se hace todo menos intuitivo. Una solución es dividir las cartas positivas en “oro” y “otras cosas que no sean oro pero sean buenas”. Haciendo que el MB tenga más ventaja al jugar esas otras cartas, fomentaría que esos “objetos/pócimas” volvieran antes al mazo, so pena de sacrificar la disponibilidad de las pócimas u objetos para los jugadores. Es decir, el MB deberá pensar si le vale la pena jugar una pócima o un hechizo o un objeto y devolverlo al mazo, a cambio de repetir toda la tirada; o jugar una carta de oro (que está bien, pero no tanto) y relanzar un solo dado. Es algo que daría más “estrategia” al juego.Lo de la carta “nada” es una idea que no he reflexionado mucho, era por dar a esa icónoca carta un significado especial.
También pensando claro, el rerollear un dado siempre saldrá más rentable en una tirada de ataque que de defensa, ya que sólo hay una cara de escudo negro. Con lo cual los rerolles de un dado a la hora de defender carecen de sentido... Quizás tuviera más sentido que las cartas dieran un reroll de un dado sólo si la tirada es de ataque, o bien un reroll de la tirada entera siempre que sea defensa. No sé...
Muchas gracias por la mención, Sitka. Sólo quería apuntar que no me resisto a que no se meta, aunque sea como regla opcional, que la carta “Nada” (por cierto, no sé por qué la catalogas como carta “negativa”, cuando es la carta más neutral del mundo) pueda ser jugada por el MB con un efecto especial y diferente: revivir a todos los monstruos de una misma sala que ya hubieran sido eliminados por los jugadores (podría decirse que estaban malheridos pero se han recuperado, por ejemplo), salvo los jefes. Añade más emoción y estrategia si el MB toma esta carta y puede dar lugar a situaciones graciosas hacia el final de la partida.Por lo demás, gran trabajo y gran aportación.