Voy a hacer una columna donde se colocaban los prisioneros a la espera de ser torturados o como aperitivo para algún monstruo o fiera.
Para ello corto una varilla con aristas para simular el fuste de la columna y una base de madera para colocarla.
Los pego con cola blanca y un tarugo de madera entre las dos piezas que refuerza la unión.
En la parte alta del fuste coloco unos ganchos para las cadenas y hago un capitel sencillo en la parte alta.
Con masilla hago la base de la columna y un suelo de piedra, pinto la columna y sombreo las aristas para que se vean con un rotulador, añado unas pequeñas cadenas con grilletes para usarse cuando se necesite.