¿Quieres ser un buscador de oro o un saboteador?Con este juego puedes probar ambos roles y sólo al final… podrás dividir el tesoro y descubrir tu rol de buscador o saboteador.

Pico en mano, un pequeño farol con una débil luz y un carro donde cargar tus piedras… no parece tan difícil, ¿verdad? Pero… ¿y si no todos los gnomos de tu compañía quisieran ayudarte?.. ¿y si alguno quisiera incluso sabotear tu misión?.. ¿y si hasta tú mismo fueses un saboteador?
“Saboteur” es un juego rápido, divertido, dinámico y sencillo.
El objetivo viene diferenciado dependiendo del rol que recibes en la carta recibida antes de la partida. Estas cartas se reparten bocabajo y cada uno mira solamente su rol. La carta no puede ser mostrada a los demás, pero sí que se puede jugar verbalmente de forma pícara haciendo creer cosas que no son… o sí son..

Los buscadores de oro deben conseguir hacer un túnel desde el punto de partida hasta la pepita de oro, mientras que los saboteadores deben impedir que esto suceda por todos los medios, pero sin dejar entrever demasiado pronto sus intenciones.

Sobre la mesa se coloca la carta de comienzo y las tres posibles pepitas, en sólo una de las cuales se encuentra la verdadera pepita. Estas tres cartas se sitúan a siete “espacios carta” de la principal. Deben colocarse bocabajo y ninguno de los jugadores debe de saber dónde se esconde la verdadera pepita.
Cuando el túnel tiene conexión con alguna de estas tres cartas, se descubre dicha carta.
La dinámica del juego es sencilla; en sentido horario por turnos, cada jugador juega una carta (cada carta una vez jugada no puede volver a ser jugada; cumple su función y después de eso se descarta) y roba otra, hasta que los buscadores de oro encuentren la pepita o se hayan jugado todas las cartas.
Hay dos tipos de cartas mezclados en el mismo mazo de juego:
Cartas de recorrido: se colocan siempre en sentido horizontal, nunca vertical y deben casar con las demás cartas con las que delimitan.
Cartas de acción: no forman parte del recorrido de los túneles, pero desempeñan funciones muy importantes.
Las cartas de acción se dividen a su vez en
tres diversas:
-Mapa: sirve para poder mirar una de las tres cartas de “posible pepita”. Dicha carta la mira solamente la persona que juega la carta mapa y después de eso se vuelve a colocar bocabajo en su sitio correspondiente.
-Derrumbe: sirve para poder eliminar cualquier carta de túnel ya situada sobre la mesa. Muy útil para ambos bandos, ya sea eliminar cartas saboteadoras o para derrumbar el túnel de los buscadores de oro.
-Daño y Cura: Estas cartas se dividen en “pico”, “carro” y “farol”. Sirven para mantener a ralla a los posibles sospechosos que dificultan tu tarea, así como para “curarse”.

Una vez intuido el peligro por parte de un jugador del que sospechas, o simplemente porque te da mala espina, puedes jugar contra él una carta de daño (con circulo rojo) ya sea de pico, farol o carro.
En ese momento el jugador ya no podrá poner cartas de recorrido hasta que se libere de dicho daño con una carta del mismo símbolo pero de cura (círculo verde).
La acción de cura la puede llevar a cabo él mismo (usando la acción se su turno o convenciendo a alguien que use su turno para hacerlo).
Un jugador puede llegar a estar dañado por tres cartas, una de cada tipo (las cuales se sitúan en la mesa frente a él y se descartan cuando viene curado), pero no podrá tener a la vez dos daños del mismo tipo.

Si los buscadores de oro consiguen llegar hasta la pepita con un túnel continuo hasta la carta de salida habrán ganado y se repartirán las “cartas de pepita”; si en cambio se juegan todas las cartas y los buscadores de oro no han conseguido llegar, ganarán los saboteadores y ellos se repartirán las “cartas pepita” (el número de “cartas pepita” depende del número de jugadores en la partida).
El jugador que más pepitas tenga al cabo de tres partidas será el ganador.IMPRESIONES PERSONALES:A mi este juego sinceramente me gusta mucho, es muy fácil de explicar, muy dinámico y realmente divertido. Tiene ese toque de desconfianza, engaño, cooperación y picardía. Diciendo medias verdades para intentar quedar bien con todo el mundo y que no te lancen daños, sin mostrar tu verdadero rol por lo que pueda pasar, pero con la intención de cumplir tu misión al fin y al cabo.
Debido a sus componentes y entramado, tanto niños como mayores se divierten.
Otra cosa buena que ofrece es su número de jugadores, de 3 hasta 10. Ideal para grupos grandes o tardes de sobremesa con amigos o familia.
FICHA TÉCNICA:Año: 2004
Jugadores: 3 - 10
Duración: 30 minutos
Editorial: Amigo
Autor: Frederic Moyersoen
Edad: +8
COMPONENTES DEL JUEGO:44 cartas de recorrido
27 cartas de acción
28 cartas de pepitas de oro
7 cartas de buscadores de oro
4 cartas de saboteadores